Martín de Los Santos Cala, había cumplido once de los quince años que le impuso un tribunal por asociación de malhechores, atraco y violación sexual.
A pesar de estar casi al término de su pena, seguía esperanzado que, esta vez, el juez de ejecución de la pena de la provincia Santo Domingo le otorgaría su libertad condicional. Procuraba no buscarse problemas con el fin de salir de prisión y cumplir a su madre la promesa que le hizo, de sacarla de la pobreza en que vive.
De los Santos, de 37 años, no pudo cumplir su cometido, y no por voluntad propia, el pasado miércoles a las ocho de la noche fue asesinado con una cuchara amolada por el reo Jean Carlos Peña, quien había sido trasladado de Moca a la cárcel La Victoria, dónde ocurrió el hecho.
Fue de maldad
“Como sabían que él iba a salir lo apuñaló, fue una sola que le dio, eso fue de maldad, yo averigüé, nosotros queremos justicia por su muerte”, dice enfurecido Elvin de los Santos, hermano de la víctima, mientras su sobrina, una niña de siete años contempla el cadáver de su padre en un ataúd a punto de ser sepultado.
Jorgito, cómo le decían en el poblado de Guanuma, Santo Domingo Norte, de donde era oriundo y fueron enterrados sus restos, era un muchacho “inquieto”.
Fue sentenciado por violar y asaltar, junto a otros hombres, a un capitán de la Policía Nacional y su esposa. En la década de los años noventa fue deportado de los Estados Unidos, pero según su amigo de infancia, Santiago Mercedes, era una persona de “buenos sentimientos”.
Era el cuarto de seis hermanos de una familia sumamente humilde, “él me quería mucho, yo lo iba a visitar todos los meses”, dice doña Eleodora de 63 años, madre del recluso asesinado, mientras miraba de un lado a otro las cuatro paredes de tabla de la casa donde recibiría a su hijo, a su salida del penal.
Piden que el homicida sea sometido a la Justicia
El agresor Jean Carlos Peña, está condenado a 20 años de prisión por robo. Las autoridades explicaron que, según este, ellos (Martín y él) habían discutido ese día. Peña respondió una agresión verbal de Santos, pero no con la intención de segarle la vida. Los familiares solicitaron al Ministerio Público abrir un expediente en contra del homicida y someterlo a la Justicia
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